El cedro se distribuye principalmente en las montañas del Mediterráneo y Asia Occidental. En México, se encuentra en regiones montañosas, especialmente en los estados de Puebla, Veracruz y Oaxaca, donde se cultiva principalmente por su madera de alta calidad.
La madera del cedro es muy apreciada en la carpintería y construcción debido a su durabilidad y resistencia a la putrefacción. Además, su aceite esencial es utilizado en aromaterapia, y su madera es utilizada para la fabricación de muebles, paneles y revestimientos. También tiene aplicaciones en la medicina tradicional.
El cedro ha sido considerado un árbol sagrado en diversas culturas antiguas, especialmente en Egipto, donde se utilizaba su madera para construir sarcófagos y templos. Su aroma es tan característico que incluso se utiliza en la fabricación de incienso y perfumes.